El informe del año 2017 de Reporteros Sin Fronteras ha situado a Cuba en uno de los peores lugares, a nivel global, en libertad de prensa. El documento, que analiza la evolución de la libertad de información en más de un centenar de países, durante el pasado año, enfatizó que Raúl Castro es el responsable del férreo control sobre los periodistas en la Isla.
En esta oportunidad, Cuba ha ocupado el lugar 173 de un listado de 180 países, y se mantiene como el país "más hostil a la libertad de prensa del continente americano".
El documento destaca que el pasado año "el régimen castrista incrementó la censura y la represión de los periodistas independientes y de la prensa de oposición que intentan subsistir en la Isla".
Reporteros Sin Fronteras destaca en su informe que "el Estado sigue monopolizando la información”, y que esa situación no ha cambiado tras el fallecimiento de Fidel Castro, al que califican “como uno de los peores predadores de la libertad de prensa en el mundo".
Cuba continúa siendo un infierno para la prensa independiente, que debe soportar "detenciones abusivas, arrestos, amenazas, campañas de descrédito, confiscación de material y cierre de sitios web, suelen ser las formas de un acoso omnipresente, reforzado por un arsenal de leyes restrictivas.
Blogueros y periodistas independientes "deben ingeniárselas con el limitado acceso a Internet en la isla; en ocasiones se ven obligados a exiliarse para preservar su trabajo o su integridad física", destaca RSF.
La radio y la televisión son estrictamente controladas por el Estado, y aquellos que intentan esquivar la censura corren verdaderos riesgos en la Isla, señala el documento.
A nivel global, Reporteros Sin Fronteras observó que hay un empeoramiento generalizado de las condiciones para ejercer el periodismo en el mundo.
El pasado año, en el mundo 54 periodistas fueron asesinados; 336, encarcelados y 54, secuestrados.
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