- 1 pechuga de pollo cortada en dados
- 1 cebolla cortada en brunoise
- 1 cebolleta cortada bien fina
- 1 diente de ajo machacado
- ½ cucharadita de ralladura de jengibre fresco
- 1 cucharadita de curry
- ½ cucharadita de comino molido
- Sal y pimienta al gusto
- 100 ml de leche de coco
- 50 ml de nata de cocinar (crema de leche menos del 35 % grasa)
- 4 cucharadas de aceite de oliva
- 1 ramito de perejil
- ½ pimiento rojo cortado en brunoise
- 1 papa grande cortada en dados
- ½ taza de caldo o agua
Salpimiente los dados de la pechuga de pollo a su gusto. Prepare todos los ingredientes y cuando los tenga listos, ponga una cazuela al fuego con el aceite de oliva.
Agregue primeramente el ajo y antes de que este se dore añada la carne. Este pollo se elabora con carne deshuesada, pero si son piezas pequeñas como los muslos, solo debe tener en cuenta que necesitará unos minutos más de cocción antes de comenzar a añadir otros elementos.
Cuando la carne se torne blanca, agregue la papa, la cebolla, el pimiento, la cebolleta y el jengibre. Deje cocinar a fuego medio y un par de minutos después añada las especias, el comino y el curry. Remueva bien para que se integren todos los elementos.
Unos minutos después comenzará a dorarse la preparación, agregue los ingredientes líquidos, es decir el caldo o agua, la leche de coco y la nata de cocinar. Ajuste el punto de sal y pimienta y tape la cazuela.
Déjelo cocinar por 10 minutos a fuego lento para que la carne y las papas absorban bien los sabores. Verifique que no se seque demasiado la salsa porque debe ser melosa.
Puede decorarlo con perejil cortado fino. Sírvalo caliente, acompañado de arroz blanco y otras guarniciones de su agrado. Espero que lo disfrute. ¡Buen apetito!!