El pasado sábado, el ex diputado opositor Fernando Balda presentó ante la Corte Nacional de Justicia en Quito una acusación formal contra el ex presidente ecuatoriano Rafael Correa, a quien culpa de haber sido el autor intelectual de su secuestro, ocurrido en agosto de 2012.
Ante la acusación, la sala de lo Penal ha ordenado a Correa comparecer cada 15 días ante la sede judicial como vinculado en la fase indagatoria del proceso que se sigue sobre el caso.
Balda ha solicitado que se averigüen bien las circunstancias en las que fue secuestrado en Colombia, pues según sostiene, asegura estar convencido de que se trató de un "crimen de Estado".
"Habría sido él (Correa), en caso de demostrarse en audiencia de juicio, quien ordenó la infracción valiéndose de la estructura del Estado y la organización de inteligencia policial de la misma, incluso permitiendo el uso de recursos ilimitados para ello”, señala el escrito.
El ex diputado opositor sostiene que sería “imperdonable” que su caso fuera tratado como un "simple secuestro", y sostiene que hay pruebas que apuntan a una dimensión y estructura criminal, organizada presumiblemente desde el Estado.
"Aquí se utilizó dinero del Estado para movilizar a personas a otro país y yo era un político en ese momento muy destacado por hacer oposición al Gobierno".
Rafael Correa ―quien reside en Bélgica desde hace un año― tenía de plazo este lunes para presentarse ante la Corte Nacional, una medida cautelar impuesta por la jueza instructora del caso.
De no presentarse pasaría a ser considerado un prófugo de la justicia ecuatoriana y ello abriría el camino a su prisión preventiva y a una posterior orden de detención internacional.
El abogado defensor del ex presidente ecuatoriano ha pedido una audiencia de sustitución de medidas para la tarde de mañana martes, día en el que Balda prevé que se lleve a cabo la prisión preventiva de no presentarse hoy en Corte.
En recientes declaraciones el ex diputado Fernando Balda ha recordado que el autor confeso del secuestro declaró en su momento “que los fines eran políticos”.
El ex diputado ha comenzado una campaña informativa nacional e internacional sobre su caso, en la que prevé visitar las sedes diplomáticas de Bélgica en Ecuador, con el fin de solicitar que, llegado el caso, ese país deniegue el asilo a Rafael Correa.
Próximamente Balda quiere impulsar la apertura de una nueva causa contra Correa también en relación con el secuestro. Tiene previsto que sea por peculado (malversación de fondos públicos), un delito que no prescribe en la legislación local, y que "lo obligaría a estar prófugo de la justicia toda la vida".
El ex presidente Rafael Correa, por su parte, ha rechazado cualquier vinculación y asegura que no existen pruebas sobre su presunta implicación en los hechos.
En una comparecencia realizada hoy desde el Consulado de Ecuador en Bélgica ―por videoconferencia― Correa ha explicado que está siendo objeto de una persecución política y mediática.
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