Las autoridades cubanas anunciaron el aumento del precio de los productos de repostería que comercializa el Estado en panaderías y dulcerías de La Habana a partir del próximo lunes, una medida que solo agrava la crisis alimentaria que atraviesa el país, marcada por el desabastecimiento y el alto costo de los víveres.
Según informó el semanario Tribuna de La Habana, la decisión se tomó tras analizar los costos que tienen las materias primas tras la entrada en vigor de la Tarea Ordenamiento.
Lisandra Alcalá Ortiz, subdirectora comercial de la Empresa Provincial de la Industria Alimentaria (EPIA) de la ciudad, debido al alza del valor de las materias primas por parte de los proveedores, la empresa no puede mantener los precios actuales porque les traería pérdidas.
A partir de ahora, en la venta minorista las galletas costarán 1.00 peso; el masarreal, las torticas de Morón, la panetela borracha, la marquesita y el rollito, 2.00 pesos, y el pionono subirá a 3.00 pesos.
En cuanto a los dulces más grandes, la gaceñiga valdrá 20 pesos. Mientras, los cakes a pedido se venderán en dependencia de su gramaje: los de 5.000 gramos a 107 pesos; los de 11.000 gramos a 248 pesos y los de 12.150 gramos a 265 pesos.
Otras variedades de dulces mantienen su valor actual. Entre ellos está el pie de fruta, el paniqueque, la rosquita, el merenguito, el panquecito y el tatianoff.
Según Alcalá Ortiz, la capital cuenta con una red de 250 unidades (panaderías, panaderías-dulcerías y dulcerías), que producen un promedio de 6,6 toneladas de dulce liberado, en correspondencia con la harina prevista en los planes de producción de la EPIA.
En febrero las autoridades subieron el precio de la papa en La Habana de 1:00 peso a 3.00 pesos la libra.
Julio Martínez Roque, coordinador de objetivos y programas del gobierno provincial, señaló a Tribuna de La Habana que la nueva tarifa era "justa, teniendo en cuenta el nivel de ingresos de la población" tras la Tarea Ordenamiento, con la cual "ninguna mercancía o entidad puede registrar pérdidas en su balance contable".
La llamada Tarea Ordenamiento ha venido a complicar más aún la vida de los cubanos, agobiados por una crisis económica que ha empeorado con la pandemia.
La escasez de productos de primera necesidad, que solo se encuentran en las tiendas en moneda libremente convertible, y el alza de los precios que ha traído la desaparición del CUC, obliga a muchas personas a acudir al mercado informal, donde también los precios de los artículos se han disparado.
Esta semana residentes en La Habana denunciaron ante Radio Televisión Martí que un cartón de huevos en el mercado negro puede costar entre 250 pesos y 400 pesos.
"La libra de leche en polvo por el estilo: 250, 300, 400 pesos. Aquí en Centro Habana la carne puerco, cuando la encuentras, está a 100 pesos la libra", declaró María López, vecina del municipio Centro Habana.
"No todas las tiendas tienen todos los productos a la venta. Para comprar en estas tiendas tienes que hacer la cola tres y cuatro días o pagar un precio de 1,500 pesos por un turno", añadió.
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