El mandatario Miguel Díaz-Canel abogó este miércoles en Twitter por una Cuba sostenible con “ciudades más verdes” y mayor compromiso con la naturaleza, y acompañó su declaración con imágenes de La Habana.
“Soñar y continuar un país: Construir una nación sostenible requiere que defendamos ciudades más verdes, con instituciones y ciudadanos comprometidos con la #Naturaleza”, escribió el mandatario, que no solo no aprovechó la oportunidad para hacerse eco y opinar sobre las quejas que incendian las redes por estos días sobre la desmedida tala de árboles en la capital, sino que además dedicó una segunda parte de su publicación a citar a Fidel Castro, quien habría dicho que "la naturaleza será también siempre nuestra fuerza".
Las quejas sobre la afirmación del gobernante -de quien muchos empiezan a cuestionar si habita en una realidad paralela- no se hicieron esperar, pues su “sueño” aterriza en medio de las crecientes críticas por la indiscriminada tala de árboles en La Habana, especialmente en el último mes.
“Parece que las Unidades de Poda de la Empresa Eléctrica no piensan y sueñan como tú”, declaró un internauta, que adjuntó una captura de un artículo de CiberCuba sobre el tema.
“Cada vez te cuesta más encontrar un ángulo desde el que quede Habana, increíble”, añadió otro que compartió imágenes de varios árboles talados.
“La naturaleza de la ciudad hay que preservarla. Las instituciones y organizaciones tienen que juzgar su papel. Cualquiera no puede cortar un árbol”, abundó un tercer comentarista sobre una realidad que tiene cada vez más preocupados a muchos residentes en la capital.
"Muy Bella de lejos. Desde arriba. Entra a sus entre calles y camina por sus baches y basuras. No me pintes más la perfección que aquí no se vive en ningún aspecto”; “da la casualidad que nada mostrado en las fotos fue creado por la revolución”; “sigue soñando”, fueron algunos de los comentarios que intentaron bajar de la nube al optimista mandatario cubano.
La avalancha de tristeza manifestada en las últimas semanas en redes sociales y especialmente en grupos de Facebook como "Habana Verde", motivó incluso un extenso artículo del diario oficialista Juventud Rebelde, destinado a indagar en la temática.
Alexander Zorrilla Torreblanca, director de la Empresa Provincial de Áreas Verdes de Servicios Comunales, explicó al citado medio que en La Habana existen 750 mil árboles, de los cuales alrededor de 250 mil deben ser sustituidos y 72 mil se encuentran bajo redes.
Indicó que "por cada uno talado se deben sembrar cinco, según establece la Resolución 479/1996 del Ministerio de la Agricultura", y matizó que "aunque no podamos cumplir ahora con ello, sí tenemos viveros destinados a esta actividad, y hemos priorizado aquellas especies que puedan desarrollarse sin afectar gravemente el entorno citadino".
Zorrilla Torreblanca declaró que para ejecutar cualquier tala o poda en la ciudad se debe estar en poder de la documentación imprescindible, que es la guía forestal o el permiso del Servicio Estatal Forestal emitido para avalar ese proceder, además de la guía de tránsito, que protege el traslado de la madera en caso de una poda.
Oscar Labrador Llanes, director nacional de la Dirección Forestal, Flora y Fauna Silvestre del Ministerio de la Agricultura, dijo que en 2020 se emitieron 1,026 guías forestales en respuesta a solicitudes de la población, y que solo se ejecutaron 529, por la ausencia de los recursos necesarios.
"No poseer los documentos normados y ejecutar deriva en una violación, en una ilegalidad, y se procede entonces a la toma de medidas, según lo dictaminado por la ley, tal y como sucedió con el caso de la tala de los dos almendros en el Vedado capitalino", argumentó en referencia a uno de los casos más comentados en las últimas semanas.
No obstante, el directivo admitió que aunque la atención al arbolado urbano es una necesidad subrayó que "es muy costosa, máxime cuando se depende del presupuesto estatal para ello".
Dijo también que a pesar de esos costes "es vital dar mantenimiento a los árboles, podarlos de manera adecuada para evitar que su crecimiento afecte actividades funcionales o genere daños en temporada ciclónica, así como capacitar al personal que realice la poda y la tala selectiva".
Insistió, además, en la urgencia de que esa capacitación llegue hasta las fuerzas del Ministerio del Interior, para que se sepa cuál es el correcto modo de actuación y se sepa identificar el delito y actuar en correspondencia con ello.
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