El expresidente mexicano Felipe Calderón calificó de “inaceptable” la visita del gobernante cubano Miguel Díaz-Canel al país azteca el jueves, para participar en los actos por los 211 años de independencia de esa nación.
“Es inaceptable el protagonismo en las fiestas del bicentenario de la consumación de la independencia de un dictador que encierra a decenas de ciudadanos cubanos”, expuso Calderón en Twitter.
“Sería el colmo que, en el día de los Niños Héroes, que representa la lucha contra el extranjero, hablara un extranjero”, apuntó el exmandatario, quien estuvo al frente del gobierno de 2006 a 2012.
Funcionarios de la embajada de Cuba en México confirmaron a la prensa local la participación de Díaz-Canel en los festejos por el 211 aniversario de la independencia de la nación norteamericana.
México festeja el llamado Grito de Dolores o de Independencia el 16 de septiembre, fecha en que el cura Miguel Hidalgo, considerado el padre de la nación, hizo el llamado al levantamiento popular en 1810. Díaz-Canel asistirá a la conmemoración en calidad de “invitado de honor” y acompañará al presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO) durante el desfile militar de la jornada.
En redes sociales comienzan a manifestarse las expresiones de rechazo a la presencia del gobernante cubano en los festejos. Mexicanos y cubanos residentes en ese país, comenzaron a dejar de inmediato sus mensajes de desacuerdo con la visita de Díaz-Canel a través de plataformas como Twitter, donde el hashtag #FueraCACAnel se volvió tendencia.
Algunos sostienen que el mandatario cubano no es bienvenido en México, por ser un dictador que puso a pelear a cubanos contra cubanos, en referencia a las manifestaciones antigubernamentales del 11J y la orden de Díaz-Canel de reprimirlas.
Por otra parte, usuarios en Twitter reaccionaron a la publicación de Felipe Calderón recordando que, en 2017, el régimen de La Habana le prohibió la entrada a la Isla, adonde pretendía ingresar con motivo del aniversario del deceso del disidente cubano Oswaldo Payá.
Otros le señalan que visitó Cuba con anterioridad, al final de su mandato, y compartió con Raúl Castro sin criticarlo entonces por la gestión del régimen. “Lo tuyo es la hipocresía y la mezquindad política”, le dicen.
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