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El transporte público en La Habana sigue siendo igual de angustioso que antes de la pandemia de coronavirus.
Luego de que el pasado miércoles 20 las autoridades eliminaran la restricción de movilidad en la ciudad y los ómnibus retomaran su horario normal, los habitantes de la capital de Cuba continúan padeciendo el mismo estrés para desplazarse que antes de la emergencia sanitaria.
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Un recorrido por sus barrios y calles que hizo la revista estatal Alma Mater comprobó que "el transporte urbano sigue en sus trece".
Las imágenes captadas en diferentes puntos de la capital cubana muestran escenas que se repiten año tras año, en un país donde el simple hecho de moverse de un lugar a otro genera angustia y preocupación.
Con cientos de casos de coronavirus diagnosticándose cada día, La Habana vuelve a exhibir multitudes que esperan durante horas en una parada de día o de noche, personas agolpadas en las puertas de las guaguas o varias tratando de coger el mismo taxi a la vez.
El mismo caos que confirma que la crisis del transporte en Cuba no termina con la vuelta a la normalidad, se supere o no la pandemia.
"No importa si es un P articulado, una guagua de las tradicionales, un flamante rutero de cinco pesos, una veloz y amarilla 'gacela' o los patrimoniales almendrones: hay días –desafortunadamente los más- en que las horas y la vida pasan en una parada o en una piquera de taxis, pero no en sincronía con los tiempos del transporte", reconoce Alma Mater, medio de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU).
Varios internautas comentaron la publicación y lamentaron que todo sigue igual en la vida diaria del cubano.
"Los choferes de máquinas cobrando lo que les da la gana. Las guaguas repletas... en fin", dijo una joven.
"Eso no tiene remedio, siguen repletas", expresó una económica.
"Conviertan las patrullas en taxis y los autos nuevos para el turismo también... ¡Ahhhh, verdad, que es el bloqueo!", pidió con ironía un graduado de Comunicación Social.
"Y eso es en La Habana, qué diremos los de 'provincias'", señaló un periodista de Artemisa.
"Sin remedio, sin solución, sin respuesta, sin cordura, sin medidas por COVID presente, y más anormalidad que nueva normalidad. Palabras al viento y al duro vivir diario del pueblo en sus calles. Qué triste vivirlo y no pasa nada, no mejora nada...", expresó una ingeniera.
Esta semana las autoridades de La Habana anunciaron nuevas medidas de flexibilización de las restricciones a la circulación de personas y medios de transporte, adoptadas meses atrás por el empeoramiento de la situación epidemiológica.
"Desde hoy se elimina la restricción de movilidad en la ciudad y se retoma el llamado servicio de ‘confronta’ en el transporte urbano", indicó el gobernador Reinaldo García Zapata.
Según el dirigente, la ciudad reabrirá gradualmente su actividad económica e institucional, basada en los datos del Ministerio de Salud Pública, que apuntan a una disminución de los casos de coronavirus.
También el próximo 25 de octubre comenzará la venta de pasajes interprovinciales para viajes en ómnibus, ferrocarriles y en el servicio multimodal La Habana – Batabanó – Nueva Gerona, que se reiniciarán el 1 de noviembre.
La Empresa de Ómnibus Nacionales anunció que garantizará la interconexión de las capitales provinciales con La Habana y entre las capitales provinciales, así como de 12 municipios con la capital.
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