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El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel llamó a los directivos y trabajadores de la termoeléctrica Antonio Guiteras, de Matanzas, a pensar con sentido innovador y determinar qué cosas hay que cambiar, y cambiarlas.
El mandatario realizó este viernes una visita a la instalación, la más importante del país, junto al nuevo ministro de Energía, Vicente de la O Levy, en medio de una crisis energética sin precedentes en el país.
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Al reunirse con el personal de la planta, Díaz-Canel instó a sus técnicos y operarios a velar por la cultura tecnológica y controlar bien todos los procesos.
En el encuentro se informó que en este momento la Guiteras está generando 237 MW, "no sin riesgos", y que tras las muchas salidas de funcionamiento en este mes, en noviembre debe tener 12 días de mantenimiento.
Por su parte, De la O Levy habló sobre un mantenimiento capital que debe hacerse en la central antes de junio del 2023 "con mucha precisión".
"Hay que hacer diagnósticos rigurosos, profesionales, sin falsos optimismos", dijo.
Con anterioridad, el gobernante recorrió la zona de la Base de Supertanqueros donde ocurrió un incendio en Matanzas que dejó 16 fallecidos.
Las autoridades locales informaron que las labores de recuperación superan el 60 por ciento.
Están demolidos los cuatro tanques afectados y se hace lo mismo con los cubetos. Se restableció el servicio eléctrico y las comunicaciones y los talleres y laboratorios dañados se reubicaron en otros sitios.
Aún no ha concluido la limpieza de los lugares contaminados.
La visita de Díaz-Canel a la Guiteras se realiza días después de que sus especialistas revelaran a la prensa estatal que la termoeléctrica matancera debe parar al menos durante tres meses para un mantenimiento general, algo imposible en este momento de crisis.
Aunque la planta sincronizó el martes pasado con el sistema eléctrico, tras varios días sin operar por una avería en la caldera, los expertos afirman que es necesario detenerla para una intervención en la mayor parte de sus estructuras, que incluya una limpieza total de los sedimentos generados por la combustión del crudo, y cambiar los tubos que han perdido su espesor y se revientan.
La población cubana sufre apagones diarios de más de 10 horas desde hace meses, y otras plantas eléctricas están constantemente fuera de funcionamiento por averías.
Al deterioro de esas instalaciones se suma el bajo salario de sus trabajadores, que provoca que muchos se vayan a sectores mejor remunerados.
Un joven jefe de bloque y operador de sala de control de la Guiteras explicó que antes de aplicarse la política de reordenamiento económico, esa empresa estaba entre las más favorecidas en el término de salario.
"Tras el reordenamiento caímos en un escalón muy bajo", dijo Yoandry Flores.
Por ahora, la "solución" del gobierno fue la destitución el lunes del ministro de Energía y Minas, Nicolás Liván Arronte Cruz, y del director general de la Unión Eléctrica (UNE), Jorge Armando Cepero Hernández.
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