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Cineastas, artistas y cubanos en general criticaron al Ministerio de Cultura (MINCULT) por su declaración sobre el encuentro de funcionarios con creadores, donde se debatió, entre otros temas, la proyección de un documental de Juan Pin Vilar en la televisión estatal sin su consentimiento.
"Los planteamientos de los artistas merecieron la mayor atención de los dirigentes de las instituciones. Los artistas escucharon con atención los argumentos de los representantes de las instituciones y expresaron sus opiniones en total libertad. La reunión transcurrió en un clima franco, constructivo y de respeto mutuo, como caracteriza a la política cultural de la Revolución", aseguró el MINCULT.
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Sin embargo, muchos echaron en falta detalles concretos sobre lo que se debatió en esa reunión, que tuvo lugar el viernes en La Habana.
Una declaración más detallada ofreció la Asamblea de Cineastas Cubanos (ACC), plataforma cívica que obligó al gobierno comunista a dar la cara y organizar la reunión.
"La respuesta del Ministerio de Cultura al nuevo acto de exclusión y censura con el documental La Habana de Fito, de Juan Pin Vilar y producido por Ricardo Figueredo, y las condiciones en que su transmisión en televisión nacional fue hecha, es que existen bases legales para tomar ese tipo de acciones en situaciones excepcionales", contaron.
En el comunicado, se mostraron en contra de ese argumento y denunciaron todos los hechos similares, además de criticar la censura, la política cultural y el panorama del cine cubano actual, según la versión de la ACC.
El propio Juan Pin Vilar se pronunció sobre la reunión, a la que dijo que asistiría solo si quedaban registros de lo que allí se dijera.
"Lo que si aseguro hasta bajo tortura es que la nota del Ministerio de Cultura NO SE PARECE EN NADA A LO OCURRIDO EN LA REUNIÓN. ¡QUE PUBLIQUEN LOS AUDIOS!", exigió.
Otros usuarios de internet no se quedaron al margen, y criticaron al MINCULT por el tratamiento tan superficial que ha dado al asunto, evadiendo los aspectos más importantes del encuentro.
"La nota muy escueta. Me quedo sin saber qué respuesta concreta se dió a la demanda por la censura a Fito en La Habana y la proyección en la televisión de una copia sin la autorización de los realizadores", escribió la usuaria Aida Saúco Méndez.
"El universo paralelo del MINCULT se parece al del NTV", aseveró la cineasta Yamila Marrero.
"¡Ustedes no tienen cara! Son una vergüenza como institución. Nadie les cree ni respeta, por mentirosos, manipuladores, pusilánimes, cobardes, matones de barrio, plegados al poder y corruptos", acotó el periodista Siro Cuartel.
El también periodista Jorge Dalton, al ver la declaración oficial, sugirió a los funcionarios cubanos que renunciaran, "por su pésima conducción, por su actitud represiva, deshonesta y antidemocrática, por su nulo respaldo y defensa a los artistas en todos estos años".
Asimismo, exigió que el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) sea dirigido por cineastas y no por funcionarios al servicio del poder político.
"Mientras las instituciones estén en manos de esos inocuos funcionarios contrarrevolucionarios y corruptos hasta la médula, el cine cubano y la cultura cubana, seguirán en grave peligro", apuntó.
Tras la polémica en torno al documental "La Habana de Fito", cineastas cubanos se organizaron y firmaron una declaración de protesta en contra del autoritarismo y la censura.
“Lo más grave es que procedimientos semejantes se han hecho sistemáticos, sobre todo en relación con el cine", denunciaron los firmantes.
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