A dos años de las protestas del 11J, muchos cubanos han recordado en redes sociales la violencia del gobierno de Miguel Díaz-Canel al reprimir las históricas manifestaciones que se produjeron en Cuba y han expresado su inconformidad con el régimen.
El 11 de julio de 2021 el mandatario Díaz-Canel pronunció la fatídica frase que desató la represión de las fuerzas del régimen. Al conocer que estaban ocurriendo levantamientos en el país se presentó en la Televisión Nacional con un discurso para enfrentar a cubanos contra cubanos.
"La orden de combate está dada, a la calle los revolucionarios", dijo Díaz-Canel y sus secuaces salieron al espacio público armados con palos y respaldados por la policía, para reprimir a los manifestantes.
“Estamos convocando a todos los revolucionarios del país, a todos los comunistas a que salgan en las calles en cualquiera de los lugares donde se van a producir estas provocaciones, desde ahora y en todos estos días. Y enfrentarlas con decisión, firmeza y valentía”, insistió Díaz-Canel.
Ese domingo las manifestaciones se iniciaron en San Antonio de los Baños, en la provincia de Artemisa. Gritando a viva voz "No tenemos miedo", "Patria y Vida", miles de personas salieron a protestar contra la precariedad, la crisis sanitaria por la pandemia del coronavirus y la falta de libertades.
El sentir de esos cubanos se extendió rápidamente a otros territorios del país. Las manifestaciones se produjeron en más de 70 localidades, pero en algunas de ellas la represión fue más severa y cobró incluso la vida de una persona, como ocurrió en el caso de La Güinera, donde hubo protestas el lunes 12 de julio.
En este humilde barrio habanero un manifestante fue baleado por la espalda por un policía. Diubis Laurencio Tejeda es hasta la actualidad el único fallecido en la manifestación que fue reconocido oficialmente por el gobierno.
El 11J marcó un hito en la historia reciente de Cuba y dejó cambios profundos. El país se hizo más ingobernable, el poder del régimen frágil, las jóvenes generaciones entendieron su importancia para el cambio político, la comunidad internacional tomó partido y reconoció problemas en el seno de la sociedad cubana.
Si bien el régimen mantiene el control del país con sus actuaciones represivas, se ha producido un despertar en los cubanos. Esto ha estado acompañado de una estampida migratoria, destierros orquestados por la Seguridad del Estado y una rápida despoblación de Cuba.
En el país permanecen detenidos más de mil cubanos que son presos políticos. Están encarcelados por tener una postura frontal contra el gobierno. Entre ellos destacan líderes opositores como el santiaguero José Daniel Ferrer, el artista independiente Luis Manuel Otero Alcántara y el rapero Maykel Osorbo.
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