A las cuatro de la madrugada ya hay gente haciendo cola en las inmediaciones del mercado Buen Viaje de Santa Clara. Todos quieren comprar carne de cerdo a 16 pesos la libra. Para entrar hay que pagar 1 peso en moneda nacional. "Aquí hay más cola que en el aeropuerto José Martí", dice un jubilado.
Jacinto vive de su retiro y cada domingo coge el uno, el dos o el tres en la cola del Buen Viaje. Gracias a que desde la noche anterior se planta en las inmediaciones de esa especie de estadio donde montan la feria agropecuaria, a las diez de la mañana de cada domingo regresa a su casa con unos bistecitos en la jabita. Los que duermen la mañana se tienen que conformar con los recortes y la grasa.
En el Buen Viaje sacan pocos perniles, porque los que de verdad hacen el agosto son los revendedores. "Hay quien amanece a las seis de la mañana y no alcanza carne. Tiene que conformarse con el pellejo", explica Jacinto a Cubanet.
Mientras tanto, la prensa oficialista habla de cómo la provincia sobrecumple tal o cual producción. Pero una cosa son los periódicos del Gobierno y otra pasarse por Placetas, donde nunca llega carne a los mercados.
La escasez de alimentos en Villa Clara fue a peor desde que el Gobierno local topó los precios, de manera temporal, y amenazó con mano dura en las inspecciones tras el paso de la tormenta Alberto.
El Chino, un carretillero, dejó de vender porque no le da negocio. Su caso no es único. Otros carretilleros han hecho lo mismo y han empezado a trabajar por la izquierda.
Desde entonces, en los agromercados privados hay exactamente lo mismo que en los estatales. "No es que no los tengamos, es que a esos precios no nos conviene venderlos y, por eso, no los sacamos a la calle”, explica un cuentapropista.
Olga Jiménez arrastra a su esposo con ella para ir a comprar pollo a la tienda en divisas porque si va sola, le venden menos: ahora toca 1 kg por persona y 5 paquetes de salchichas por consumidor. La racionalización ha llegado también a las tiendas Cimex, que lucen estanterías vacías. Lo único que no se agota son las latas de atún a 8,00 CUC, un precio prohibitivo en un país donde el sueldo medio es de 29,60 CUC.
Ahora mismo, en los agromercados de Villa Clara sólo hay mango, boniato, plátano, ajo, cebolla, ají y bijol. No hay nada para hacer una ensalada.
Los que no alcanzan carne de puerco a 16 pesos en el Buen Viaje, no tienen más remedio que comprarlo más caro en La Casa del Lechón. En cuanto el carnicero avisa de que traerán un cerdo, se escuchan aplausos. "Esto es hambre y lo demás es bobería", dice un anciano.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: