En plena escasez de alimentos básicos en Cuba y medidas de regulación de la venta de esos y otros productos, la agricultura en la Isla sigue sin sacarles todo el potencial a sus tierras, según el medio oficialista Cubadebate.
"Los terrenos que tienen rendimientos buenos o muy buenos son solo el 33% de la tierra agrícola", señaló el investigador José Luis Rodríguez al citado medio. El resto, un 67% necesita una inversión extra de fertilizantes o pesticidas para que la producción sea favorable, además de agua, agrega.
Pese al llamado reiterado del gobernante cubano Miguel Díaz-Canel a mejorar la producción en todos los renglones, el país continúa sin lograr los alimentos necesarios para reducir los más de 2 mil millones de dólares anuales que gasta en importaciones.
Según señala Cubadebate, la mejora de la productiva de las tierras cubanas podría disminuir entre 600 y 800 millones la compra de productos a otros países. En 2018, la Isla exportó hasta azúcar de Francia porque la zafra no cumplió los objetivos previstos.
Cuba cuenta con unos 11 millones de hectáreas de tierras disponibles, de ellas 6 millones para los cultivos y la ganadería. Pero, las medidas para incrementar la efectividad del campesinado no han tenido los resultados esperados.
Ni la entrega de tierras ociosas, la descentralización de la comercialización agrícola o el permitir la venta directa a los hoteles, han incentivado los resultados de los campesinos, en su mayoría organizados en cooperativas.
El sector agropecuario aporta solo un 3,6% al Producto Interno Bruto de Cuba, especifica el citado medio.
La nueva situación de desabastecimiento, reconocida incluso por el sucesor de Raúl Castro, evidencia, además, que Cuba no logra responder a las necesidades alimentarias básicas de sus ciudadanos sin tener un socio económico fuerte, antes la URSS y ahora Venezuela, que está sumida en una crisis económica, política y humanitaria.
Este 17 de mayo se celebra en la Isla la firma por el fallecido dictador Fidel Castro de la primera Ley de Reforma Agraria, con la cual expropiaron tierras en Cuba a quienes tenían más de 400 hectáreas y las entregó a los campesinos en 1959.
60 años después, los trabajadores de la tierra siguen enfrentando problemas en el país como la falta de insumos necesarios para aumentar la producción de sus tierras.
"Los campesinos estamos dispuestos a trabajar y producir más, pero nos tienen que priorizar todos los insumos", señaló hace apenas una semana uno de ellos en una carta a CiberCuba.
Asimismo, este abril quedaron fuera del anuncio de un mercado mayorista para los cuentapropistas en Cuba, que comenzará a funcionar a partir del segundo trimestre de 2019. "Han perdido una muy buena oportunidad" de "extenderla" a los campesinos, dijo uno de ellos a Radio Martí.
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