Fue declarada la cocina cubana como Patrimonio Cultural de la nación ya que, aseguran, “constituye parte de la identidad nacional y metáfora de lo que representa Cuba como conglomerado étnico”.
La noticia fue dada a conocer por la Comisión para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial en el marco de la séptima edición del Festival Culinario Internacional que se desarrolló en La Habana esta última semana, señalan los medios de prensa de la isla.
“La cocina en Cuba es el resultado del proceso de transculturación que se dio en el país y en el que interviene la herencia cultural aborigen, hispana, africana, francesa, franco-haitiana, china y estadounidense, fundamentalmente”, afirmó la presidenta del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, Gladys Collazo.
Así mismo puntualizó la funcionaria cubana que se trata de “una expresión cultural que comprende los saberes y prácticas transmitidos de una generación a otra” dando lugar a “una cocina cualitativamente nueva”, agregó.
Hace justo un año un grupo de chefs del país aspiraban a que la cocina cubana tuviera esta categoría, porque “tanto la diversidad como la influencia de diversas regiones del mundo, así como la perdurabilidad en el tiempo de la memoria gastronómica del pueblo hacen acreedora a la cocina de la Isla de tal distinción”, señalaba en octubre de 2018 Eddy Fernández Monte, presidente de la Federación de Asociaciones Culinarias de la República de Cuba.
El próximo paso sería que la UNESCO incluyera a la cocina de la isla en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, un proceso que según se ha asegurado, lleva en desarrollo por lo menos par de años.
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