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En medio de una situación difícil para muchos cubanos que ven imposible la adquisición de productos alimenticios, el Gobierno de Holguín ha decidido desplazar a 12 usufructuarios de las tierras que trabajan, porque construirán viviendas.
La denuncia llegó a la columna Acuse de recibo, del periódico oficialista Juventud Rebelde, a nombre de Luis Dain Gámez Pión.
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Reside en el reparto Caribe, municipio de Moa, y según cuenta la notificación les llegó desde la Dirección Municipal de Planificación Física.
El anuncio ha causado descontento en estos agricultores que desde hace por lo menos 10 años llevan trabajando la tierra y gracias a ella le dan alimento a sus familias con lo que son capaces de producir.
Para este holguinero el Gobierno debe tener en cuenta tres elementos importantes para desistir de la idea de sacarlos del sitio.
La primera es que el trabajo en el campo es el sustento económico de estas 12 familias. En segundo lugar, si los sacaran de allí, se estaría desechando “la idea de hacer de cada pedacito de tierra una parcela para la producción de alimentos” y en última instancia el impacto medioambiental que tendría en la zona.
Sobre este tema asegura el propio Luis en su misiva “que la representante del CITMA en el territorio no aprueba la idea por ser esa un área húmeda donde corren un río y varios manantiales”.
“En mi opinión, afirma, para la ejecución de viviendas que se pretende deberían tener en cuenta otros terrenos de mejores condiciones de firmeza en el suelo. Sería bochornoso, como ha ocurrido en otros lugares, que se han comenzado las labores de construcción, y con el paso de los días han tenido que echar por tierra esas ideas, porque las irregularidades del terreno no permiten continuar, y los recursos utilizados quedan a merced del tiempo y la destrucción”, agrega el usufructuario a nombre de sus otros 11 compañeros.
Así mismo declara que las autoridades del territorio tienen conocimiento de esta inconformidad y espera que tengan en cuenta la queja.
Luis no solo habla de cómo lo pudiera afectar a él, si no a otras once personas, “todos jubilados ya sea por edad o por enfermedad, y que su único sostén es ese pedacito de tierra al que han dedicado varios años de su vida”, concluye.
El tema de la producción de alimentos en Cuba ha sido catalogado por las propias autoridades como un asunto de “defensa nacional”, sin embargo se le ponen demasiadas trabas a los productores agrícolas y tiene que sortear indiscutible de medidas, que los propios campesinos califican de “bloqueo interno”.
Sobre este tema varios campesinos de la isla han desmentido al ministro de la Agricultura del país, asegurando que la burocracia, y no el embargo, impide que hoy se produzca mucho más en los campos cubanos.
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