El gobierno pidió a los cubanos que donen dinero para cofinanciar la producción de alimentos en las provincias e Isla de la Juventud, y regulará donativos de empresas estatales, que serán depositadas en nuevas cuentas bancaraias creadas para ese fin, según trascendió de una reunión habitual del ejecutivo para analizar la crisis económica de Cuba, agravada por el coronavirus.
Las donaciones privadas podrán hacerse en pesos y en CUC, explicó el ministro de Economía y Planificación (MEP), Alejandro Gil Fernández, que regulará la donación gubernamental, mediante un decreto, que establecerá el depósito en esas cuentas de toda o parte de la recaudación de empresas estatales en concepto de obras y servicios cobrados al sector privado.
En algunos casos, empresas estatales realizan trabajos a entidades privadas y "vamos a regular que esos ingresos se depositen" en las nuevas cuentas de donativos populares para la producción de alimentos, explicó Gil Fernández.
El Banco Central de Cuba (BCC) procederá a abrir las cuentas en los próximos días en cada territorio, informó el ministro sin precisar la fecha de entrada en vigor de la iniciativa gubernamental.
Las donaciones en pesos y CUC se "van a utilizar por las instancias territoriales para el desarrollo, el fomento de la producción de alimentos”, aseguró el también vice primer ministro, a cargo de la Economía de Cuba.
Cuba atraviesa una aguda crisis económica que impide cubrir la canasta básica, un desabastecimiento que ha empeorado con el impacto del coronavirus, según informes oficiales y reportes de prensa.
Los ingresos de la actividad turística internacional cayeron un 9.3% el año pasado y se han visto reducidos de modo drástico ante las restricciones de viajes emitidas en otros países y por el cierre de fronteras y expatriación de viajeros, ordenado por el propio gobierno cubano para frenar la propagación de la pandemia.
La caída abrupta de los precios del petróleo privó a Cuba de sus opciones de reventa de petróleo comprado a precios subsidiado a Venezuela y revendido a países del Caribe; obligando a La Habana a intensificar sus esfuerzos en la venta de servicios médicos en el extranjero.
El gobierno cubano reconoció a fines de abril los efectos del coronavirus en la crisis económica que arrastra desde hace varios años y dijo que considera aplicar medidas tomadas durante el llamado Período Especial, incluido el racionamiento y el control de precios de los productos básicos.
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