Conforme pasan las horas, nuevas imágenes difundidas en redes sociales completan los instantes de violencia que vivieron este los jóvenes concentrados frente al MINCULT para demandar la liberación de activistas detenidos arbitrariamente.
En las imágenes se ve cómo tras el gesto de Alpidio Alonso de arrebatar el teléfono al periodista independiente, Mauricio Alonso -precedido de la frase “A mí me respetas”- varios funcionarios en grupo, y agentes de la Seguridad del Estado vestidos de civil, procedieron a arrinconar a los jóvenes contra una cerca en medio de empujones y gritos.
Entre los nuevos vídeos que han salido a la luz se observa cómo una mujer, funcionaria del Ministerio o de la Seguridad del Estado, forcejea violentamente con la artista Celia González, vestida de rojo y blanco en las imágenes.
"Nosotros somos artistas", "¿Por qué la represión si somos artistas?", "¿Por qué hay policías si no somos delincuentes?", "¿Por qué hay gente presa y por qué hay policías aquí con pistolas?", preguntaron varios de los congregados en el lugar -entre ellos Maykel Osorbo- segundos antes de que Alonso, que aparentemente se acercaba para conversar, desatara la violencia.
En las imágenes se puede escuchar que Osorbo y otros de los congregados condicionan su entrada a la institución al hecho de que se fueran de las calles circundantes toda la policía que había apostada para impedir la llegada de nuevos manifestantes.
"Hoy el ministro de Cultura Alpidio Alonso se destapó como propinador de golpes y la policía más educada del mundo hizo subir a empujones a artistas e intelectuales que solo querían dialogar y que se respetaran los derechos", escribió en Twitter, Ismario Rodríguez, fotorreportero de Periodismo de Barrio, junto a un breve vídeo que mostró la represión de que fueron víctima los manifestantes también en el momento en que fueron montados en la guagua que los sacó detenidos del lugar.
Mientras todo eso pasaba, el monopolio de las telecomunicaciones, ETECSA, cortó durante unas horas los datos móviles a los cubanos.
Poco después, en una nota oficial titulada “No quieren diálogo y provocan hasta el límite”, el Ministerio ofreció su propia versión de los hechos y no se retractó, en lo absoluto, de la violencia ejercida por el ministro de Cultura y otros funcionarios contra los manifestantes.
Por el contrario, funcionarios cubanos negaron que el ministro de Cultura agrediera a los manifestantes y la televisión cubana sacó al aire un programa especial sobre lo ocurrido. En el programa, Teresa Viera, especialista del Ministerio de Cultura, aseguró que el ministro solo "se quitó un teléfono que lo estaba apuntando", y negó la posibilidad de una agresión.
Después del violento incidente, que ha conmocionado a cubanos dentro y fuera del país, muchos ciudadanos están pidiendo la dimisión de Alpidio Alonso y del viceministro, Fernando Rojas.
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