El diplomático Josep Borrell, alto representante para la Política Exterior de la Unión Europea (UE), reconoció que el embajador en Cuba, Alberto Navarro, había cometido errores.
"Es evidente que se han producido errores, pero hay que valorarlos en su justo término y cuando la valoración esté terminada, contestaré a los diputados", dijo Borrell durante una conferencia de prensa este miércoles .
Así mismo, mencionó su reunión con Navarro, a quien llamó para rendir cuenta por las opiniones que emitió recientemente sobre Cuba ante la prensa independiente y la firma de una carta dirigida al presidente norteamericano Joe Biden pidiendo el fin del embargo.
"Yo no considero que Cuba sea una dictadura", dijo Navarro a la periodista independiente Camila Acosta en una reciente entrevista.
Las acciones del diplomático provocaron que un grupo de 40 eurodiputados firmaran una carta en la que pidieron su destitución de manera inmediata.
“Diríase que nuestro embajador en La Habana toma posicionamientos políticos en consonancia con un régimen que no respeta ni defiende los derechos humanos ni la pluralidad democrática y se permite licencias más propias de un dirigente político que de un representante diplomático”, dice el documento.
Una semana después, la vicepresidenta del Parlamento Europeo, Dita Charanzová, presionó a Borrell para que tomara una decisión con respecto al funcionario en La Habana.
"Pedimos que el embajador Navarro comparezca ante el Comité de Asuntos Exteriores y respuesta a los eurodiputados del Parlamento Europeo”, dijo a través de un comunicado.
Varios opositores cubanos enviaron una misiva al eurodiputado español Herman Tertsch, del partido español VOX, en la que demuestran su apoyo por la petición para cesar a Navarro de sus funciones en Cuba.
"Estimamos que su proceder en Cuba no responde a los valores de democracia y libertad que representa la Unión Europea, los cuales compartimos dentro de Cuba y por los cuales sufrimos represión por parte del régimen de gobierno que impera por la fuerza en nuestra nación", dice el documento que firmaron unos 10 opositores y activistas de la isla.
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