El economista Ángel Marcelo Rodríguez Pita considera que en Cuba existe la percepción de que pudiera darse un estallido social en cualquier momento.
La interrogante ¿Se avecina una revuelta popular en Cuba? abrió debate este martes en Las mañanas de CiberCuba que inició con un video de Cubanet de un fuerte despliegue policial en los alrededores del Hospital “Calixto García”, donde se encuentra ingresado el líder del Movimiento San Isidro Luis Manuel Otero.
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La imagen, así como el aumento de la represión en los últimos tiempos, sugieren el temor por parte de las autoridades de la isla a una manifestación masiva.
“Mientras aumente el proceso inflacionario aumentará la tensión y, por tanto, aumentarán las personas que salgan [a protestar]”, dijo Rodríguez Pita.
Tras décadas de crisis económica, la población se acostumbró a carecer de todo y salvo ocasiones contadas, las inconformidades no rebasaban los límites de lo privado. Sin embargo, en los últimos meses se han registrado cientos de protestas ante una compleja situación económica, política y sanitaria en la isla.
“Si sales a la calle y te paras en una cola y te pones a conversar con la gente siempre lo primero que te dicen es ‘Esto está duro’, y lo segundo que te dicen es ‘en cualquier momento se arma”, dijo el economista y agregó que es una creencia que “está en la mente” de las personas cuya carga de tensión es evidente.
“Usted se para en la calle Reina y observa a las personas, es decir, no tiene ni siquiera que interactuar, sino observar cómo se mueven, como caminan y usted siente la carga. Hay una carga, hay un peso que usted comienza a observar dentro de la sociedad y es un peso contundente”, precisó.
No obstante, Rodríguez Pita señaló que existen tres factores que alivian la crisis económica y que contribuyen a “canalizar una serie de necesidades”. Estos son el mercado informal, el conformismo o autocomplacencia y la ayuda económica desde el exterior en forma de remesas.
Un informe del Observatorio Cubano de Conflictos publicado recientemente ha contabilizado 203 protestas solo en el mes de abril, a pesar de la fuerte presencia de efectivos militares y policiales a lo largo del país debido al Congreso del Partido Comunista de Cuba.
Desde noviembre a la fecha casi un millar de manifestaciones antigubernamentales fueron recogidas por la misma ONG que bajo la dirección de Juan Antonio Blanco Gil monitorea la atmósfera de disenso público en la isla.
Un punto de inflexión lo constituyó el allanamiento a la sede del Movimiento San Isidro el 26 de noviembre que dio lugar a las protestas de intelectuales y artistas frente al Ministerio de Cultura en La Habana el día siguiente y el y 27 de enero.
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