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Después de varios días sin mostrarse, las autoridades de Alquízar repartieron cinco cajas de cigarro a la población de ese municipio en la provincia de Artemisa, cuya comunidad se encuentra aislada en sus hogares por regulaciones ante la pandemia del coronavirus.
“En el municipio Alquízar estamos trancados no podemos salir de nuestras casas, y ahora lo que nos traen son cinco cajas de cigarros, cigarros, no COMIDA!!!! Los vecinos parecen locos en el camino”, denunció este lunes en redes sociales la activista Diasniurka Salcedo.
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Días atrás, Salcedo hacía otra publicación dirigida a las autoridades municipales, lamentando que permanecieran encerrados en sus hogares y con medidas severas. “Yo y todos mis vecinos desde febrero no recibimos pollo”, dijo.
“En marzo picadillo y en mayo solo dos paquetes de detergente y un paquete de picadillo, y en lo que va de junio dos panes”, enumeró Salcedo, advirtiendo que sería “la primera en protestar” si sus hijos permanecían más tiempo sin alimentarse debidamente.
“¡Comida para el pueblo cubano! Están pidiendo refuerzos para que vigilen todos los puntos de entrada y salida!!! No pidan refuerzos y pidan comida!!!”, escribió entonces.
En una ocasión previa, Salcedo dijo que sus disgustos con las autoridades habían llegado a afectarle su salud.
“Es tanta la rabia que me he enfermado. Estoy con una colecistitis de la vesícula provocada por el estrés. Fui al hospital, y después de hacerme una serie de estudios, el médico me lo diagnosticó, pero en Cuba no hay medicamentos y no me pueden atender porque estamos en una situación crítica”, relató.
A comienzos de mes, la opositora, que realiza labores de ayuda a personas vulnerables de su comunidad, se enfrentó directamente a los agentes de la Seguridad del Estado que mantenían vigilada su casa.
“Entonces, a ver, ¿ustedes se han puesto a analizar la cantidad de campo que hay por sembrar, de tierra ociosa, a ustedes no les da vergüenza perder el tiempo con tanto que hay que hacer, señor mío, para estar velando a una mujer que lo único que hace es clamar por los derechos no solamente míos sino de todos los que viven en este barrio?, que no hay alimentos, que no hay medicinas...”, les dijo.
Salcedo acumula un largo historial de agresiones por parte de la Seguridad del Estado que incluyen numerosas detenciones, vigilancia y también multas.
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