Una donación de más de tres millones de dólares del gobierno de Sudáfrica a Cuba desató una fuerte polémica en el país africano luego de que varios integrantes de su parlamento advirtieron que el donativo debió destinarse a los propios sudafricanos con niveles de pobreza.
Medios de comunicación de la nación africana hicieron referencia a los debates sobre el intercambio económico con Cuba y manifestaron su preocupación por el uso de ese dinero una vez que llegue a manos del gobierno cubano.
El parlamentario conservador Willem Faber criticó a las autoridades sudafricanas por "desvivirse por encontrar nuevos medios para derrochar dinero en Cuba”. El funcionario agregó que en los últimos 10 años, “se han gastado 1,400 millones de rands sólo en acuerdos con el gobierno cubano para emplear a trabajadores y proveedores de servicios cubanos en Sudáfrica, dinero que podría haberse gastado en crear oportunidades de empleo y en aliviar los problemas de seguridad alimentaria en su país".
Faber también advirtió que la prioridad de su nación deberían ser las relaciones con países económica y políticamente influyentes, como China, Rusia y Estados Unidos, pues la isla caribeña apenas puede impulsar su propio desarrollo.
La economista Miyela Mkhabela, directora general y jefa de Antswisa Transaction Advisory, dijo que la donación sudafricana es parte de un agradecimiento al pueblo cubano por los médicos y especialistas que ha enviado a su país, incluso en 2020, en medio de uno de los picos de contagios por COVID-19.
En agosto de 2021, otro escándalo en Sudáfrica tuvo relación con Cuba, cuando la recién nombrada ministra de Defensa Thandi Modise, anunció que tomaría medidas contra los funcionarios y generales del ejército involucrados en la compra de Heberon Alfa R que su país realizara a la isla por una suma de 17,7 millones de dólares para supuestamente enfrentar los estragos del coronavirus.
"Si la eficacia del fármaco es buena o no, no viene al caso. El punto aquí es quién autorizó esto fuera del Departamento de Salud. Se debe seguir el proceso de adquisición. No puedo despertarme mañana y decir que quiero un helicóptero y ya está”, indicó la representante gubernamental.
A inicios de la pandemia, autoridades de la Fuerza de Defensa Nacional de Sudáfrica (SANDF) autorizaron la compra del Heberon (Interferón) alfa-2b desde Cuba, por un valor de 260 millones de rand (17,7 millones de dólares), a pesar de que la Autoridad Reguladora de Productos Sanitarios de Sudáfrica (SAHPRA) prohibiera su empleo en el tratamiento del COVID-19.
En enero de 2022, devolvió los fármacos comprados en la isla, aunque sin completar los pagos del acuerdo comercial entre ambos países. El general Rudzani Maphwanya, jefe de las Fuerzas de Defensa Nacional (SANDF) informó que el impago responde a las irregularidades detectadas en la adquisición del medicamento, comprado por el Departamento de Defensa de Sudáfrica sin contar con los permisos de las autoridades competentes.
Otro incidente que relaciona procederes ilegales entre Cuba y el país africano aconteció en mayo de 2021, cuando el sindicato sudafricano Solidaridad impuso una demanda contra el Congreso Nacional Africano (partido político en el poder) luego de que la ministra de Asentamientos Humanos, Agua y Saneamiento diera la bienvenida a 24 ingenieros cubanos para abordar la crisis del agua en Sudáfrica.
¿Qué opinas?
VER COMENTARIOS (3)Archivado en: