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La diputada Mariela Castro Espín, hija del exgobernante General Raúl Castro, dijo que el nuevo Código de las Familias, aprobado este viernes por la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), fortalecerá el sistema político cubano y eximió de responsabilidad a la dirigencia histórica del régimen por los desaciertos cometidos y la supresión de derechos fundamentales.
Castro Espín manifestó su respaldo a la nueva legislación porque, según su discurso durante el IX Período Ordinario de Sesiones de la ANPP, permite que el régimen avance hacia una mayor democracia y representación social.
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“Yo quiero particularmente agradecer a nuestro pueblo, porque nuestro pueblo ha participado, ha adquirido conciencia, ha fortalecido su cultura. Realmente en este proceso legislativo (...) yo tengo que reconocer que como sociedad nos hemos crecido”, afirmó la también directora del Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX).
La funcionaria reconoció que nunca existió unanimidad durante el proceso de consulta popular del nuevo Código de las Familias y que en la cúpula gubernamental del país llegaron incluso, a temer por su fracaso.
Tras su aprobación por parte de la Asamblea, el Código de las Familias será sometido a referendo popular el venidero 25 de septiembre.
Castro Espín agregó que era necesario agradecerle a “la generación histórica de la Revolución, porque la generación histórica de la Revolución recogió todo lo mejor de la historia de la humanidad para ponerla en esta obra, con aciertos y desaciertos, con contradicciones, con grandes dificultades”.
Según sus palabras, los máximos dirigentes del castrismo superaron prejuicios propios y fueron capaces de identificar los cambios que necesitaba el país para mejorar y avanzar.
“No se le puede depositar culpas a nadie, a ninguna generación porque todos los procesos de conquista de derechos son contradictorios y difíciles”, agregó.
Mariela Castro destacó que el país había llegado al Código sin apuros pues “el socialismo no se hace de la noche a la mañana. Ese proceso profundo de creación de conciencias como el que se requiere en un proceso revolucionario, no se resuelve solo con discursos o con leyes, se requiere un trabajo riguroso y profundo como el que esta Revolución ha desarrollado en más de 60 años para llegar a este momento”.
Agregó que había que agradecer a Fidel y Raúl Castro y se emocionó hablando de su familia, exaltándola como supuesta promotora de los derechos refrendados ahora por la legislación aprobada.
“Tengo que agradecer a mi madre porque el amor que nos inculcaron, los valores que nos transmitieron, el compromiso con la Revolución y con la historia, la humildad (...) nos llevó a poner en la práctica mucho de estos valores que el Código está defendiendo”, añadió Castro Espín.
La Agencia Cubana de Noticias (ACN) informó que la legislación obtuvo el voto unánime de los diputados. Durante la mencionada consulta popular, el documento recibió un 61.96% de opiniones a favor.
El texto legal ha levantado importantes contradicciones dentro de la sociedad cubana. Cuestiones como la legalización del matrimonio igualitario, el cambio del concepto de patria potestad por el de responsabilidad parental y la posibilidad de una mayor influencia del estado en la educación de los menores de edad, están entre los temas más polémicos.
Además de la posibilidad de unión matrimonial entre personas del mismo sexo, el Código de las Familias también permitiría que estas parejas adopten niños, duplicaría los derechos de las mujeres y promovería la distribución equitativa de las responsabilidades domésticas. Asimismo incluiría novedades como los acuerdos prematrimoniales y el embarazo asistido.
Alarmado por la falta de unanimidad con respecto a este mecanismo legal, el gobernante Miguel Díaz-Canel, reconoció en marzo la disparidad de opiniones e insistió en que durante los meses de verano,había que seguir trabajando con las personas y las familias, para concientizar en la importancia del voto positivo durante el referendo.
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