La cubana Marina Copo González, licenciada en Laboratorio Clínico y hasta hace poco integrante de la Brigada Médica Cubana en Venezuela, falleció de un infarto durante la travesía hacia Estados Unidos.
La joven, de 34 años, era natural de Santiago de Cuba y madre de un menor de edad que dejó al cuidado de familiares en la isla, dijeron a CiberCuba allegados de la fallecida.
"Ella estaba de misión en Venezuela, Estado Zulia. Ella desertó y cruzando la Selva del Darien, le dio un infarto y murió. Eso es lo que sabemos", dijo una fuente que pidió no ser identificada.
Copo viajaba como parte de un grupo, aunque no fue posible establecer cuántos de ellos -salvo una más- habían abandonado la brigada. Por los testimonios a los que CiberCuba tuvo acceso, todo parece indicar que su cuerpo no será repatriado a Cuba.
“Parece que salieron de su Estado ella y una estomatóloga. No sé si el resto del grupo era de la misión. Lo más triste de todo es que hay fotos de ella muerta y de cómo la enterraron en la selva. Muy duro todo”, agregó.
En cualquier caso, queda por ver si las autoridades cubanas accederían a la repatriación del cuerpo, teniendo en cuenta las sanciones de prohibición de entrada a Cuba que impone el régimen a quienes abandonan misiones en el extranjero.
La página de Facebook El Chago-Santiago de Cuba lamentó la muerte de la trabajadora de la salud, extendió condolencias a familiares y amigos, y agregó que “Copo González desertó de la misión en Venezuela y en su travesía hacia los Estados Unidos falleció de un infarto”.
La causa de muerte también fue confirmada por una allegada a la laboratorista quien precisó que el ataque cardíaco sucedió mientras estaba “cruzando la selva del Darién”, de acuerdo a un comentario en la misma red social.
Asimismo, sus amigos y colegas se pronunciaron en redes sociales. “Hoy recibimos la triste noticia de tu partida. Es imposible creer que te hayas ido, nos cuesta aceptar que ya no estarás junto a nosotras. Eras tan jovial, carismática y social. Así te recordaré por siempre”, lamentó Diamela Giralt en Facebook.
“¿Cómo te pudo pasar esto? Estamos muy dolidas con tu partida. EPD”, expresó y agregó, a modo de rúbrica, el nombre y la profesión de la difunta, así como el Policlínico 28 de septiembre, institución de salud donde trabajó.
Otro amigo, el activista Yosmany Mayeta Labrada, también tomó las redes para rendir tributo póstumo a quien fuera, además, su compañera de estudios.
“Si hay personas a las que recuerdo con mucho agrado, era a ti. Después de estudiar juntos desde pequeños y luego verte como trabajadora de salud en el Laboratorio del Policlínico 28 de septiembre y sacándome sangre para los análisis, era estar en buenas manos”, dijo.
“Siento mucho que un infarto te haya arrancado la Vida sin haber cumplido tu sueño de tocar tierra americana. Mi más sentido pésame a tu hermana y mi amiga Danay Copo Gonzalez, a tu mamá que la quiero mucho y demás familiares. Dios te guarde donde estés y toda mi solidaridad con la Familia. Mi Corazón está con ustedes en este difícil momento”, concluyó.
A finales de junio trascendió que otra cubana, de 41 años, murió en el Tapón del Darién. “Dicen que le faltaba el aire y empezó a convulsionar”, explicó la hija de la señora a CiberCuba, y aclaró que la muerte ocurrió el lunes 18 de junio mientras su madre y el grupo de 30 personas en el que viajaba escalaban una pendiente.
De acuerdo con un informe sobre el Movimiento Migratorio Mensual de Viajeros por la República de Panamá, de enero a mayo del presente año 2,143 cubanos cruzaron el Tapón del Darién.
La cifra excede en más de un millar las estadísticas de diciembre, cuando 997 cubanos atravesaron la peligrosa selva, seguidos de 751 haitianos y 542 venezolanos, en su intento de llegar a territorio estadounidense.
En apenas 10 meses del presente año fiscal que comenzó en octubre, más de 177 mil cubanos han logrado llegar a Estados Unidos por puntos fronterizos, en lo que constituye el éxodo irregular más numeroso en 60 años, superando incluso la estampida del Mariel en 1980, cuando en siete meses arribaron unas 125 mil personas a Estados Unidos.
A pesar de la detallada documentación de los flujos migratorios por parte de autoridades de otros países, las cubanas nunca han publicado las cifras de sus ciudadanos fallecidos o desaparecidos al intentar emigrar.
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