La población del municipio Las Tunas tiene que hacer colas diarias y apuntarse en listas para comprar gas licuado ante el aumento de los cortes de electricidad.
En un reportaje de la televisora local Visión Tunera, se expuso la situación a la que se someten cientos de clientes que hacen fila desde muy temprano en la mañana para esperar por la llegada del gas.
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Los ciudadanos criticaron que se hacen listas de hasta 150 personas y después empieza otra con determinada cantidad de números cuando se acaban los cilindros de gas disponibles en el punto de venta.
Una tunera dijo que han pasado hasta cinco días “en la misma letanía” para poder comprar el gas porque a veces no alcanzan. “Se hace difícil porque hay poco gas y muchas personas”, expresó otro cliente.
La falta de organización también convierte la adquisición del gas en una odisea porque, aunque se hacen listas para asegurar el lugar de cada uno, muchas veces los responsables de estas abandonan la fila o se agregan más personas de las que realmente comprarán.
Raima González Ramírez, jefa del punto de venta 5 del reparto Buena Vista, declaró que la venta se realiza de manera diaria a partir de que llega el gas al territorio y se entrega a los clientes hasta que se termine.
Añadió también que “entra todo el combustible que realmente tenemos asignado a nivel de país y se le distribuye a todos los puntos para su venta diaria", sin embargo, explicó que ha habido un aumento de clientes porque “no tienen corriente en estos momentos por el déficit de generación eléctrica”.
Un chofer de uno de los camiones transportadores de los cilindros de gas comentó que deben esperar a que el producto llegue de otras provincias proveedoras (generalmente desde Santiago de Cuba o Camagüey) y a la hora que arribe, se distribuye a los puntos de venta paulatinamente. “No podemos llegar a todos al mismo tiempo”, dijo.
Según el conductor, su horario abarca de las 7:30 de la mañana hasta la hora que terminen y reparten el gas en los puntos todos los días excepto el domingo.
A mediados de julio se habilitó la venta de cilindros en la aplicación EnZona para contribuir a eliminar las aglomeraciones en los puntos de venta físicos, pero se consideró que podría ser un problema surtir estos y la tienda virtual.
José Luis Mora Pérez, director de CUPET en Las Tunas, admitió entonces que en 2021 vendían en un día 1,600 “balitas”; este año, 2,700. “Eso nos permite comprender que no alcanza el suministro para la demanda, es la razón por la que en estos momentos entra la misma cantidad o más y, aun así, se percibe el desabastecimiento”, afirmó.
En otros territorios de Cuba también los ciudadanos pasan hasta dos y tres días haciendo cola para comprar la llamada “balita” de gas licuado.
En Pinar del Río, donde no se permiten hacer listas para organizar el orden de los compradores, las personas tienen que pasar todo el día (y hasta la noche) par cuidar su lugar. En esa localidad los vecinos denunciaron que los turnos eran vendidos a precios altísimos y los cilindros alcanzaban, incluso, los 700 pesos.
La situación crítica con los apagones ha llevado a la desesperación a las personas que dependen de la electricidad para preparar sus alimentos y se ven obligadas a esperar largas horas y días por una alternativa que tampoco soluciona la situación.
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