Malestar entre la población por escasez de detergente en Artemisa

La escasez de detergente en Artemisa ha desatado el malestar y las quejas entre la población en ese territorio.

Según la prensa oficialista local, la falta del producto se debe al traslado del envasado del detergente a una nueva planta.

“La empresa mixta Suchel TBV S. A. –ubicada en la Zona Especial de Desarrollo Mariel- se dedicaba a envasar el detergente en una instalación provisional y pararon en diciembre a fin de trasladarse para la nueva planta. Según nos comunicaron deben empezar a producir detergente en polvo y líquido a mediados de enero”, aseguró Alberto Meireles González, director de la División Artemisa, de la Cadena de Tiendas Caribe, en declaraciones recogidas por El Artemiseño.

Pese a las justificaciones, aún no se conoce cuando iniciará la distribución del detergente marca TBV en la provincia.

“Este sábado entró un contenedor de detergente en polvo Brisas, el cual es importado. Debe abrirse y comenzarse a distribuir en tiendas en CUP de la provincia el próximo martes”, agregó el funcionario.

Por su parte, las autoridades de las tiendas CIMEX, que fueron consultadas por El Artemiseño, indican que no tienen detergente en existencia y desconocen cuándo entrará este surtido.

A finales de diciembre pasado trascendió que la empresa cubano-vietnamita Suchel TBV S.A busca cubrir la demanda de detergente en la isla, tras no concretar los planes previstos para incrementar la presencia en tiendas del producto de aseo.

Las autoridades confiaban en que cuando se termine en 2023 el montaje de esta nueva fábrica de detergente en la Zona Especial de Desarrollo del Mariel, “pensamos que podemos cubrir la demanda, aunque no de forma inmediata”.

La nueva fábrica tendrá una capacidad de producción anual de 70,000 toneladas de detergente en polvo y de 20,000 toneladas de detergente líquido, que se procesarán con tecnología avanzada y automatizada.

En julio de 2020, en plena pandemia, numerosos cubanos comenzaron a fabricar su propio detergente, ante la profunda carencia de productos de aseo en la isla.

Con un jabón de lavar, un pedazo de jabón de baño, una lata de detergente en polvo, una cucharada de vinagre y una de bicarbonato, lograban hacer un líquido espeso para dejar limpia la ropa.