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Una familia cubana fue detenida por las autoridades migratorias de México y no pueden viajar a Estados Unidos a pesar de estar beneficiados con el programa de parole humanitario.
Según informó Telemundo51, Yudith Mandina, Roberto Montero y Roberto Mario Montero están detenidos desde el 16 de febrero en el Centro Migratorio de Acayucán en Veracruz.
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El día que fueron apresados, llevaban sus permisos de viaje emitidos por el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos y los documentos de su parole humanitario, pero no contaban con la autorización para moverse a través de México.
Niurka Almeida, familiar residente en Estados Unidos, ha hecho gestiones con los abogados en México para que Yudith, Roberto y su hijo sean liberados. Sin embargo, las autoridades no los dejan salir del centro migratorio y siguen pasando los días sin que los tres cubanos reciban una respuesta a su caso.
La familia había intentado abordar un vuelo a Estados Unidos desde Cancún, pero hubo un presunto inconveniente en la emisión de su autorización de viaje y no pudieron volar. Tuvieron que trasladarse por vía terrestre a la Embajada de EE.UU. en México, en ese tránsito un retén migratorio los detuvo en Veracruz.
Manuel Márquez, abogado mexicano especializado en migración, señaló que el hecho de no llevar el salvoconducto para viajar por México no justificaría la detención de estos cubanos.
"Tienen derecho a no ser privados de su libertad ni ser retenidos por una autoridad administrativa sin una orden judicial", dijo Márquez.
El 16 de febrero otros migrantes cubanos beneficiarios del programa parole humanitario fueron detenidos por las autoridades migratorias de México.
La semana pasada tres de esos cubanos detenidos, fueron liberados y pudieron reunirse con sus familiares en Miami. Todavía otras personas permanecen en centros migratorios sin ningún motivo aparente.
Entre ellos destacan los casos de Luis Ángel Sánchez y Noelvis la O Pereira que se encuentran en la estación migratoria de Las Agujas.
Familiares de estos migrantes han denunciado posibles irregularidades en los trámites de la liberación de estas personas en los centros migratorios mexicanos. Aseguran que "un abogado sí puede sacar a la persona, pero cobran entre 1,500 y 5,000 dólares. Eso es sin saber si el abogado es bueno o no, o si está en conexión con los agentes de migración".
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