El gobernante Miguel Díaz-Canel admitió ya que Cuba no logrará los 3.5 millones de turistas internacionales que aspiraba recibir este año, un duro golpe a los intentos de paliar la crisis económica, pero a la vez, una realidad que no sorprende a nadie.
La semana pasada, al clausurar la X Legislatura de la Asamblea Nacional, el mandatario señaló que la recuperación de la industria turística sigue impactada por la inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo por el gobierno de Estados Unidos, y por otras cuestiones relacionadas con la logística, el combustible y la energía.
"No logrará los 3.5 millones de visitantes proyectados para el año, pero muestra un ritmo de crecimiento que debe superar todos los indicadores de 2021-2022, gracias a la recuperación del destino Cuba en países emisores estables durante la etapa prepandemia", dijo.
En lo que va de año, el país ha recibido 1,309,000 visitantes internacionales, con lo cual se quedó un 20 por ciento por debajo de lo previsto. La cifra, representa apenas el 51 por ciento de lo registrado en el mismo periodo en 2019.
Según detalló a los diputados Alejandro Gil Fernández, ministro de Economía y Planificación, se cumplió el pronóstico de turistas día y hasta el momento se alcanzan los niveles de ingresos en divisas planificados, recogió Juventud Rebelde.
En cuanto el turismo nacional, se recibieron 2,922,000 turistas día y se espera alcanzar en el año el plan de 7,654,000 turistas día.
El gobierno cubano esperaba recibir en 2023 unos 3.5 millones de visitantes internacionales, el sector no logra despegar después de la parálisis provocada por la pandemia de la COVID-19.
Hasta inicios de mayo, habían llegado al país un millón de turistas, de los casi 1.2 millones que debían haber recibido para ese entonces, según informó el ministro Juan Carlos García Granda en la Feria Internacional de Turismo, FITCuba 2023.
A pesar de ello, en opinión del dirigente, la cifra patentizaba la recuperación del sector.
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