El derecho cubano Rogelio Armenteros debutó el 14 de junio de 2019 en Grandes Ligas. Luego de partir de su tierra natal, firmar con los Astros de Houston por un bono de 40 mil dólares y brillar por cinco campañas en Ligas Menores, el habanero coronó el principal sueño de cada beisbolista en el mundo.
Armenteros dejó marca de 1-1, 4.00 de efectividad, 18 ponches en 18 innings y un FIP (Fielding Independent Pitching) de 2.77.
En esta primavera, el de 25 años se presentó con los Astros de Houston para continuar su carrera en busca de una temporada de consagración en MLB.
Sin embargo, una molestia en el codo derecho le llevó al salón de operaciones y luego de una cirugía el pasado 14 de marzo, le fue removido un espolón óseo que le dificultaba lanzar.
Armenteros pronto comenzará con los movimientos de recuperación. El yeso de la operación fue sustraído en el día de hoy y en algunos días se espera le retiren los puntos de sutura de la cirugía.
Pese a que Armenteros consolidó un notable debut en 2019 donde los rivales le batearon .243, en varias ocasiones fue bajado a Triple-A sin muchas explicaciones: "A veces es frustrante. Depende como te haya ido. Si te fue bien y te bajan uno se frustra, pero a la vez no tienes el control sobre eso. Así te haya ido mal siempre te sientes mal cuando te bajan", dijo el antillano a CiberCuba en entrevista realizada a principio de los entrenamientos de primavera.
Ahora Armenteros cuidará de su recuperación. La salud es el primer objetivo para consumar el regreso. Entre ocho y 16 semanas, depende de cómo evolucione, retornará a las actividades de un béisbol pausado hasta nuevo aviso, debido a la pandemia del "Coronavirus".
Estos meses de interrupción, se habla del inicio de la temporada a mediados de mayo, podrían darle al cubano el suficiente tiempo de retorno a la acción y luego de un acondicionamiento en las Menores volver a ser llamado a Grandes Ligas.
Según datos de Fangraphs, el lanzamiento más mortífero del cubano es el cambio, rankeado de 60 en la escala de 60. Aunque marcó 95 millas como máxima en su recta, establemente lanzó en las 91 millas, mientras que se apoyó de su curva y slider el 24% de las veces. Armenteros posee las herramientas para ser un abridor de MLB, tarde o temprano, ese es su destino.
Es muy pronto aún para sostener si Armenteros retornará a Grandes Ligas en 2020. Mi apuesta personal es que lo logrará. Regresar de una cirugía ahora es la meta principal. Lo próximo: Armenteros ha demostrado ser un beisbolista capaz de convertir lo imposible en posible.
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