El Tribunal Supremo de Justicia en Venezuela ha declarado ilegítima a la Asamblea Nacional, controlada por la oposición, en clara evidencia de la inestabilidad política que se vive en el país.
En su declaración el presidente del Tribunal Supremo, Juan José Mendoza, calificó las acciones de este órgano como "inadmisibles".
El magistrado también declaró nulos todos los actos llevados a cabo por la Asamblea Nacional desde su inauguración el 5 de enero, al mismo tiempo que alertó de que puede haber "responsabilidades individuales" en el ámbito penal.
Para Mendoza este órgano "no tiene una directiva válida" ya que incurre en la "usurpación de atribuciones".
El mensaje de la corte oficialista fue criticado por el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, a través de Twitter.
"Este Parlamento se mantiene muy firme en las decisiones tomadas, aquí no hay ningún tipo de elemento. Siempre estamos dando la cara al pueblo de Venezuela para la reconciliación", aseguró en el tuit.
"La cosa más triste que pudimos escuchar, es que declararon inconstitucional la ayuda humanitaria, cuando hoy nuestra pueblo muere de hambre", añadió.
Países vecinos y de la comunidad internacional han desconocido el gobierno de Maduro, que asumió un segundo mandato de seis años el 10 de enero, por considerar que el proceso electoral no brindó garantías para la participación opositora.
Pero el dirigente defiende que sus adversarios, apoyados por Estados Unidos, buscan derrocarlo para apoderarse de las riquezas petroleras venezolanas.
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