Decenas de jóvenes cubanos viven el automovilismo y todo lo que rodea al mundo de los carros con pasión. Esta afición les lleva a reunirse alrededor de carros que entre acelerones y derrapes llenan de humo, polvo y ruido las pistas por donde transcurren las carreras.
Entre las máquinas favoritas de los participantes se encuentra el carro de fabricación rusa Lada. "El Lada se dice popularmente que es el carro del cubano. Esta generación que hay ahora, nació y se ha creado con Ladas en la familia", señala uno de los participantes.
Sin embargo como todo carro cubano que se precie no hace falta investigar mucho para encontrar los 'inventos' que dejan a los vehículos prácticamente irreconocibles. Uno de los mecánicos participantes confirma que "Nosotros lo que hacemos es inventar mucho [...] tratamos que suba la eficiencia del automóvil".
Sin embargo, desde Amigos del Motor también son conscientes de los problemas que los fanáticos del motor han podido causar a la sociedad.
"Hoy tenemos dificultades con las actividades de aceleración. Hay algunos carros con sus pilotos que han sido cuestionados porque no han venido a las Actividades de Amigos del Motor para hacer esa carrera o esa actividades de aceleración, sino lo han hecho en la vía pública, lo han hecho en las autovías poniendo en riesgo a la población, a niños, ancianos y están siendo investigados", asegura un representante de la organización.
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