Un reciente reportaje de Sol Visión (Guantánamo) ―centrado en un proyecto educativo de judo en las escuelas cubanas para niños entre 7 y 12 años― ha sacado a la palestra nuevamente a Antonio Castro, uno de los hijos más polémicos y conocidos de Fidel Castro.
Cirujano ortopédico de profesión, ha sido embajador de la Confederación Mundial de Béisbol y Softbol (WBSC), vicepresidente de la Federación Internacional de Béisbol de Cuba, y médico oficial de la selección cubana de Béisbol.
Sin embargo, la fama de “Tony” Castro ―como también se le conoce― no ha sido ganada tanto por sus virtudes profesionales, como por una vida de lujos que hace dos años dio la vuelta al mundo en varios medios de prensa internacionales.
En su más reciente faceta profesional, ha reaparecido Antonio Castro como Embajador del Judo Mundial, distinción otorgada por la Federación Internacional de Judo, cargo que ostenta desde 2016.
En la presentación de sus embajadores mundiales, destaca el texto de la Federación Internacional de Judo:
“Todos son grandes nombres. Algunos de ellos eran conocidos mundialmente por sus extraordinarias actuaciones, otros actuaban en el área comercial o política. Lo que todos tienen en común es su fantástica pasión por el deporte dedicada a una determinada idea de los seres humanos”.
Entre los embajadores mundiales de Judo figuran nada menos que Vladímir Putin, El Príncipe Alberto II de Mónaco o el Jeque Hazza bin Zayed Al Nahyan (Jefe de Estado de los Emiratos Árabes Unidos) o el presidente de Azerbaiyán.
La descripción de Antonio Castro en la web oficial de esa institución, destaca:
“Antonio Castro Soto Del Valle es uno de los cinco hijos nacidos de Fidel Castro y su esposa, Dalia Soto del Valle. Antonio es médico y apasionado del deporte. Cuba organizó con éxito dos Grand Prix”.
En enero de este 2018, ya estuvo de visita Antonio Castro por Venezuela con un proyecto similar de masificación de esa disciplina deportiva en las escuelas venezolanas.
Entrevistado en este reportaje de Sol Visión, Antonio Castro ha descrito el proyecto que defiende:
“Estamos hablando de un proyecto donde los niños practicarían el judo, que todos sabemos los valores que crea dentro de la persona, a respetar al contrario, a ganar, a perder, a convivir, son valores realmente necesarios en la formación de los seres humanos”.
Amante de paseos en yate por las costas del Mar Egeo, habitual de los Festivales del Habano y ganador en abril de 2013 de una de las categorías del torneo de golf Montecristo (en Varadero), Tony Castro ha reaparecido en un proyecto de masificación de Judo en las escuelas cubanas.
Ha reaparecido en un modesto reportaje local de menos de dos minutos de duración resaltando valores como el respeto al contrario, a saber ganar, perder y a convivir.
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