Vídeos relacionados:
Falta poco para que se cumpla una semana desde que se conociera la injusta condena a un año de prisión impuesta al biólogo cubano Ariel Ruiz Urquiola por el presunto delito de desacato a las autoridades cubanas.
El hecho levantó la indignación entre la comunidad científica dentro y fuera de la Isla; algunos de sus miembros han redactado este lunes una carta abierta en la que manifiestan su profunda preocupación por la arbitraria medida contra el Doctor en Ciencias Biológicas.
Lo más leído hoy:
Ariel y su familia gestionan en usufructo legal una finca en Viñales, la cual se encontraba bajo constante hostigamiento por parte de las autoridades desde hace varios años. Según los agentes que lo arrestaron, el científico los habría comparado con la Guardia Rural, gesto que detonó el arresto.
Sin embargo, la familia de Ariel asegura que poseen un video de la discusión que prueba que el biólogo no hizo tal comparación. La detención habría estado motivada por las denuncias que había realizado Ariel sobre una red de corrupción en el manejo del ambiente en esa área protegida de Cuba y porque pretenden confiscarle la finca.
La carta pidiendo la liberación de Ruiz Urquiola fue firmada por numerosos y reconocidos profesionales de las ciencias, entre los que destacan aquellos con grados de Máster y Doctorados en universidades como la M.I.T y Princeton.
A continuación, reproducimos la carta íntegra firmada hasta el momento por más de una treintena de profesionales:
Cuba y el mundo, 14 de mayo de 2018
A:
Consejo de Estado de La República de Cuba, Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Jefatura Nacional del Cuerpo de Guardabosques de la República de Cuba, Centro Nacional de Áreas Protegidas de Cuba, Fiscalía General de la República, Ministerio de la Agricultura, Ministerio de Ciencia Tecnología y Medioambiente, Representación de la FAO en Cuba.
Esta carta la suscribimos cubanos y cubanas desde dentro y fuera de la isla, pero también personas con las más disímiles nacionalidades. Con ella hacemos patente nuestra más profunda preocupación a partir de la injusticia cometida el 8 de mayo de 2018 por las autoridades locales de Viñales (Cuba), contra el Doctor en Ciencias Biológicas por la Universidad de La Habana y ciudadano cubano, injustamente encarcelado, Ariel Ruiz Urquiola.
Ariel y su familia, gestionan bajo usufructo legal una finca en ese territorio pinareño. La finca constituye el último proyecto de vida de este biólogo, luego de que se le impidiera ejercer su profesión en el Centro de Investigaciones Marinas (CIM), así como la docencia en la Facultad de Biología adscripta a su alma mater, la Universidad de La Habana; por razones no bien establecidas ni demostradas por las autoridades laborales implicadas. En esta finca, Ariel, su hermana, su madre y un grupo de colegas y amigos han desarrollado, con esfuerzos propios, un enorme sacrificio, y en consonancia con todas las normas legales del país, un proyecto agroecológico y productivo que pone en valor los recursos que hacen parte del patrimonio biológico local y nacional.
El proyecto intenta manejar y conservar estos recursos en armonía con las regulaciones locales, nacionales e internacionales de las que Cuba es signataria, sobre manejo del ambiente y producción sostenible, además de contar con la conformidad de la Empresa Agroforestal La Palma y la Delegación del Ministerio de la Agricultura en el Municipio Viñales, quienes en fecha reciente evaluaron satisfactoriamente las labores de siembra y limpieza llevadas a cabo en la finca. Además, Ariel fue debidamente avalado por el Secretario del PCC de la Universidad de La Habana, quien emitió un certificado sobre sus condiciones y capacidad para proceder con las labores de labranza e investigación, a partir de su formación y devenir académicos.
El proyecto de Ariel y su familia tiene importantes repercusiones, no sólo ambientales, sino también económicas y sociales. La finalidad principal es generar un modelo productivo próspero y respetuoso con el medio ambiente, que tribute al sistema estatal cubano para la distribución de alimentos, por entender que esta es una actividad vital para la nación y el pueblo, así como para la generación y conservación de un banco de material genético en base al patrimonio forestal cubano, que permita repoblar antiguas zonas de especies maderables con importancia económica para el país.
Sin embargo, esta familia ha encontrado no sólo trabas burocráticas, también una resistencia local desgastante, encubierta y sistemática, al manejo respetuoso del ambiente y la otra forma de vida que han estado implementando, con incursiones violentas y sabotajes dentro del territorio legalmente bajo custodia de Ariel y su familia, por campesinos locales amparados por determinadas autoridades. A pesar de los intentos por poner el peso de la ley sobre estas acciones de sabotaje y sus responsables, Ariel y su familia sólo han encontrado que los infractores están siendo apoyados oficialmente, y ellos mismos han pasado a ser tratados como personas socialmente reprochables.
Por otra parte, Ariel y su familia han denunciado una red de corrupción en el manejo del ambiente en esta área protegida de Cuba.
Recientemente, y luego de un largo e intenso historial de hostigamiento sistemático y frente a una actuación inapropiada de agentes locales de la ley, Ariel les comparó con la infelizmente famosa guardia rural del pasado cubano, al negarse los representantes del Cuerpo de Guardabosques a identificarse como corresponde a cualquier funcionario público en el ejercicio de su función social. Este simple hecho lo ha llevado a juicio “por desacato”, y se le ha aplicado la pena máxima: una sentencia de un año de cárcel.
Creemos que toda persona, independientemente de sus ideales o intereses políticos, tiene derecho a expresarse libremente, a ser tratado con dignidad, y a que sus actos sean juzgados con imparcialidad y de acuerdo a los procedimientos establecidos por la ley. Y esto está en línea con los propios planteamientos de las autoridades de la nación. Sin embargo, muchos de estos supuestos no se han cumplido en este caso. Es por ello, que exigimos la inmediata liberación de Ariel y una revisión concienzuda e inmediata del caso a las más altas instancias de los organismos vinculados a este grosero atropello.
Creemos que las medidas aplicadas a Ariel han sido desproporcionadas, injustificadas e irracionales, mientras que las otras demandas de la familia han sido desestimadas a la ligera con clara violación de los procedimientos legales. Constituyen agravantes la situación de salud de su hermana, aquejada de cáncer, y de quien el Dr. Urquiola se ha hecho cargo facultativamente a causa de las probadas irregularidades médicas asociadas al caso; además de la precaria situación emocional de su anciana madre, a raíz de todo este panorama.
Varias generaciones de profesionales de la Biología y de la Ciencia cubana, y colegas de otras prestigiosas universidades a nivel mundial conocemos a Ariel como docente, científico y persona, y somos muchos los que lo consideramos un referente moral de sacrificio por el conocimiento y la conservación de la naturaleza cubana, una persona íntegra, fiel a la verdad e intransigente con todos, pero muy en especial con él mismo. Esos afectos y reconocimientos, y la completa seguridad de que Ariel hoy está siendo víctima de un complot de las autoridades locales en Viñales, son los que nos hacen recurrir a ustedes.
Por otra parte, la reciente sentencia de un (1) año de prisión parece tener la finalidad de que Ariel exceda los 6 meses fuera de la finca para lograr que se pierda el derecho de usufructo sobre la tierra que rodea la casa. Aunque su hermana se ha hecho cargo eficientemente del cumplimiento de los compromisos con las entidades que custodian la tenencia de la tierra, durante las estancias académicas de Ariel en el extranjero, y no está dispuesta a renunciar a este proyecto que la involucra como parte activa y determinante desde sus inicios.
Ya ha sido presentado el Recurso de Apelación donde se esgrime, por parte de la defensa, inconformidad con los HECHOS que el tribunal da por probado si se tiene en cuenta que se le otorga una trascendencia y repercusión penal a las frases proferidas (…), cuando en realidad se encuentran ausentes los elementos típicos del delito de desacato*.
Creemos que las posibles consecuencias de este caso deberán ser dimensionadas a tiempo y de forma realista por las autoridades implicadas en sus máximas instancias, para no lamentar una irreversible pérdida de credibilidad ante el pueblo cubano y el mundo. Conocemos a Ariel, y sabemos que será fiel a la razón y la verdad, sin importar las consecuencias, y queremos evitarle y evitar, para todos, males mayores. Luego de esto no habrá justificación alguna para que el uso desproporcionado y abusivo del poder que ha coartado los derechos y libertades del biólogo Dr. Ariel Ruiz Urquiola, generen trascendencias de alcances ilimitados.
*Extraído de la copia del Recurso de Apelación.
Atentamente,
Dr. Ángel Vale González
Lic. Isbel Díaz Torres
Dr. Armando Urquiola Cabrera
Dr. Danny Rojas Martín
Dra. Susana Tobenas Borrón
MSc. Carlos Alberto Martínez Muñoz
MSc. Alejandro Rosales Trinchet
Dr. Armando Chaguaceda Noriega
Dr. Arq. Yasser Farrés Delgado
MSc. Alain Parada Isada
MSc. Romina Alzugaray Martínez
Lic. Ariel Portal
Dra. Wendy González
Antonio J. Fernández
Viviana Fernández-Silverman
Dr. Francisco P. Chávez
MSc. Alejandro González González
Lic. Jimmy Roque Martínez
Lic. María José Machicote García
MSc. Alejandro Alvarez Paneque
Prof. Titular Fernando Ojeda Copete
Dr. Rafael Borges da Silva Valadares
Dra. María Jesús García Pereira
Dr. David Posada
Dra. Lourdes Alemán
Dr. José A. Alemán
Dr. Orlando B. Alonso
Ing. Eduardo Caballero
MSc. Corinne Gonzalez
Dr. Erwin Portoundo Campa
Dr. Amaury Caballero
Karen Caballero
Para sumar tu apoyo a esta causa, por favor, envía tu nombre (y grado científico si fuera el caso) al correo solidaridadarielcuba@gmail.com. También puedes sumarte a la campaña en Change.org. Gracias
Archivado en: