El periodista oficialista Humberto López justificó el destierro de la activista por la democracia Anamely Ramos, a quien el gobierno castrista no le permite entrar al país.
López, quien gracias a su papel de vocero de la dictadura tiene un escaño en el Comité Central del Partido Comunista, citó en su muro de Facebook el Decreto-Ley 302 de 2012, que modificó la llamada "Ley de Migración" de 1976.
El también abogado compartió el Artículo 24.1 del Decreto-Ley, que faculta al gobierno para negar la entrada al territorio nacional a cualquier persona que estimule, realice o participe "en acciones hostiles contra los fundamentos políticos, económicos y sociales del Estado cubano".
López publicó un post de Anamely, donde la integrante del Movimiento San Isidro relata todo lo sucedido el miércoles en el Aeropuerto Internacional de Miami, a partir del momento en que la compañía American Airlines le informó que no podía volar a Cuba porque el gobierno no la dejaba entrar.
Pese a los esfuerzos de Humberto López, la acción de las autoridades cubanas de no permitir la entrada al territorio de una ciudadana que mantiene su residencia en el país, es una "aberración gubernamental contra la legalidad" en palabras del abogado cubano de Inmigración en Estados Unidos Willy Allen en declaraciones a CiberCuba.
"Es indignante que el gobierno cubano niegue la libre circulación de sus ciudadanos al país donde residen en desprecio de los derechos universales establecidos. Haber impedido el acceso a Cuba de Anamely Ramos merece la más enérgica condena de los organismos de derechos humanos y las naciones democráticas de todo el mundo", afirmó categórico.
Allen sugirió que Anamely podría pedir una extensión de su visa de visita a Estados Unidos con el argumento de que el gobierno de su país de residencia no le permite retornar.
"La extensión es recomendable para que ella permanezca cumpliendo estrictamente los términos de estancia legal en territorio estadounidense y pueda realizar cualquier trámite posterior sin ningún impedimento", aseguró.
Anamely Ramos tuvo una reunión con representantes del aeropuerto de Miami y de American Airlines, en la que le aseguraron que "existe un protocolo con Cuba y además con todos los países del mundo, donde ellos tienen que acatar lo que dice Cuba en materia de migración, y que si Cuba dice que una persona es inadmisible y no puede entrar al país, ellos tienen que acatar".
Tras verse obligada a abandonar la terminal aérea, la académica y curadora de arte cubana se dirigió al emblemático restaurante Versailles a seguir reclamando su derecho a volver a su patria.
"Esto continúa. Mi exigencia sigue siendo que se respete mi derecho a regresar", dijo.
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