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Las motos y los bicitaxis que prestan servicio de transporte en Matanzas han subido los precios de los trayectos, alegando el aumento del valor del combustible y la escasez de piezas de los vehículos, disponibles solo en el mercado negro.
Una periodista del semanario local Girón criticó a los transportistas privados, los cuales, ante el escaso parque automotor estatal, asumen la transportación de muchos residentes, sobre todo en tramos cortos.
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Jessica Acevedo, la autora del texto, afirma que en muchos casos los precios a pagar no se corresponden con la distancia recorrida, y que impera la ley de oferta y demanda.
Según la reportera, los transportistas no fijan una tarifa máxima para el cobro del pasaje según el tramo recorrido. Solo media un acuerdo verbal previamente establecido con los bicitaxeros o motoristas de la piquera.
"Ante una irregularidad, de nada sirve protestar o tratar de hacer valer tus derechos como cliente o consumidor. Aquí impera la ley del más fuerte. Si no pagas lo pedido, te quedas. Si te quejas, tampoco montas", aseguró.
"Si intentas ajustar un precio, los restantes transportistas casi lincharán al que acceda por tal de no poner en peligro la intocable tarifa. Si amenazas con denunciarlos a un inspector, nunca más pondrás un pie (por no decir otra parte del cuerpo) en ninguno de esos artefactos", añadió Acevedo.
La periodista reconoció la subida del precio de los mantenimientos y de las piezas de repuesto para estos vehículos, y la imposibilidad de adquirirlas de forma legal en moneda nacional.
"La propia transportación estatal ha aumentado sus precios para buscar rentabilidad. No cuestionamos el incremento, sino los abusos excesivos...", recalcó.
La grave crisis de combustible obligó a las autoridades matanceras a adoptar medidas para ayudar en el transporte de la población.
Desde este miércoles los vehículos estatales tendrán que parar en todos los puntos de embarque de pasajeros, una medida que hace recaer en empresas e instituciones la responsabilidad del gobierno en el traslado de los ciudadanos.
El déficit de combustible en Cuba ha mantenido desabastecido a más de 100 servicentros en todo el país.
Según la empresa CUPET, no ha podido disponer de la totalidad de su flota de pipas para abastecer gasolineras porque tuvo que emplearlas en el suministro a grupos electrógenos, tras la parada y salida del sistema electroenergético nacional de la termoeléctrica Antonio Guiteras.
Las autoridades de Matanzas prohibieron la venta de combustible en depósitos externos (tanques) a personas naturales, por lo que los clientes solo pueden comprar la cantidad de litros que admita su automóvil.
El gobierno provincial anunció que a partir del miércoles 23 de marzo, se suspendía la medida de limitar la venta de combustible diésel y gasolina directo al tanque del vehículo.
La paralización de las operaciones por desabastecimiento en las gasolineras ha obligado a los choferes a hacer colas durante horas para comprar gasolina y petróleo.
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