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Los precios se han disparado en Holguín, donde un cartón de huevos -un alimento esencial para los cubanos- cuesta por encima de 1,200 pesos, monto que equivale a más de la mitad del salario mínimo en Cuba, en medio de una de las inflaciones más altas del mundo.
Según reveló el diario local ¡Ahora!, el costo de los alimentos en esa provincia ha llegado a cifras exorbitantes. Además del elevado precio de un “file” de huevos, el periódico precisó que una bolsa de leche en polvo cuesta 600 CUP, y el litro de aceite, 700 y más.
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En varios puntos de venta estatales y particulares los precios reflejan los efectos de la inflación donde el salario mínimo -fijado en 2,100 pesos- no alcanza para complementar la exigua dieta de la canasta básica. Para aumentar las porciones recibidas del gobierno, habría que ofrecer 120 pesos por una libra de frijoles negros o de azúcar; 50 por una de arroz y 25 por la de boniato.
Si ya es excesivo el precio de la carne de cerdo, comercializada en la Isla de la Juventud a 340 por libra, en Holguín llega a pagarse hasta 400 pesos.
“El mismo pequeñito bombón producido en La Chocolatera, que hasta hace muy poco comprábamos a cinco o 10 centavos CUC hoy en el Punto de Venta localizado en un tramo del bulevar cuesta 20 pesos, por cierto, lo que menos valía entre cerca de una decena de productos expuestos en tablilla, pues todos los demás sobrepasaban su costo real, como una fina cuña de masa real a 25 pesos”, comentó el medio.
En comercios estatales como La Crema, hay propuestas gastronómicas “fuera de su objeto social que va desde chicles, caramelos gomitas, bebidas energéticas hasta otras más fuertes aún por su efecto en el organismo y también en el bolsillo, por la cifra de mil 620 pesos”, señaló el reportaje.
Los precios de los alimentos no son los únicos que exceden las posibilidades de quienes únicamente dependen de su salario o de una ínfima pensión. Las frazadas para limpiar pisos se venden a 235 y 250 pesos; los aplicadores de algodón a 56, paquetes de seis croquetas de yuca a 35 “y así un sinnúmero de productos o artículos con su valor duplicado o triplicado por arte de magia”, subrayó el texto.
Según la nota de ¡Ahora!, en Holguín se han implementado acciones para la contención de la inflación, “así como medidas de impulso al control popular sobre los precios abusivos y especulativos, que algunos no acaban de interiorizar”.
Sin embargo, la incapacidad del gobierno para detener la inflación y regular los precios hace que alimentarse se convierta en un lujo en toda Cuba.
En apenas un año, los precios de los alimentos han llegado a cifras exorbitantes, mientras los cubanos siguen percibiendo salarios muy bajos, los peores de América Latina después de Venezuela.
La escasez de productos en un contexto de excesiva inflación empeora la situación de los cubanos. Recientemente trascendió la noticia de que la Empresa Avícola Holguín (EAH) desarrolla un programa de cría de codornices como una alternativa para mitigar la imposibilidad de sostener la producción de huevos de gallina en esa provincia.
La precaria alimentación de las gallinas y la entrada tardía de sus reemplazos al territorio, son la causa principal del déficit productivo en el país, en un momento en que las opciones de ingesta de proteína se vuelven inaccesibles por los altos precios en el mercado.
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