El mismo día que en los Estados Unidos se celebran las elecciones que decidirán al presidente de la nación durante el período de 2025-2029, dos caravanas migrantes, con cubanos incluidos, partieron desde el sur de México con el objetivo de alcanzar la frontera con los vecinos del norte.
Según el diario mexicano La Jornada, el mayor grupo de caravanistas salió desde Tapachula, con unos 2,500 extranjeros de Centro, Sudamérica y El Caribe, principalmente. Mientras que otro grupo, de unas 500 personas, partió de la capital del municipio de Tuxtla Gutiérrez.
“Sí lo programamos para esta fecha para que los Gobiernos de México y Estados Unidos nos presten atención que somos una clase obrera que cada día más queremos cumplir un sueño y una meta que es llegar a Estados Unidos con un plan migratorio legal y una oportunidad de trabajo”, expresó el venezolano Heyson Díaz.
Sobre la caravana que marchó desde Tuxtla Gutiérrez, Luis García Villagrán, director del Centro de Dignificación Humana, dijo que el destino es la Ciudad de México, con una parada en el municipio de Arriaga, ubicado en la costa de Chiapas, para esperar a la caravana que salió desde Tapachula.
Luego de reunirse en esa localidad, los caravanistas caminarán hacia Juchitán, Oaxaca, donde harán una asamblea para definir por qué ruta seguirán hacia la Ciudad de México, con el fin de evitar a los contrabandistas y extorsionadores.
“La gente tiene miedo, pero muchos van a estar saliendo en operación hormiga”, aseveró el funcionario que también indicó que en el grupo viajan migrantes de Centroamérica, Venezuela, Colombia, Ecuador, Cuba y otros países.
Recientemente se conoció que entre los cientos de migrantes que por estos días han saturado las oficinas del Instituto Nacional de Migración (INM) en la frontera sur de México, para agilizar y verificar sus citas de CBP One con el objetivo de pedir asilo en Estados Unidos, también se encuentran cubanos.
César Augusto Cañaveral Pérez, coordinador de la Pastoral de Movilidad Humana en Tapachula, explicó a la agencia EFE que principalmente son de Cuba, Venezuela y Nicaragua, aunque también hay otras nacionalidades.
En las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2024, la candidata demócrata Kamala Harris y el republicano Donald Trump presentan enfoques migratorios contrastantes.
Harris propone reforzar la seguridad fronteriza manteniendo algunas de las políticas restrictivas de la administración Biden en cuanto al asilo, como un mayor número de agentes de la Patrulla Fronteriza y un control más estricto en los procesos de asilo para reducir los cruces ilegales.
Además, busca una reforma migratoria integral que incluya un camino hacia la ciudadanía para inmigrantes indocumentados, priorizando la reunificación familiar y otorgando oportunidades de regularización.
Por su parte, Trump ha propuesto medidas de control más restrictivas. Su plataforma incluye la promesa de realizar la mayor deportación masiva en la historia de Estados Unidos, centrándose en los más de 11 millones de inmigrantes en situación irregular.
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